El Diario Ya sobre Entre dos orillas

El Diario Ya sobre mi libro Entre dos orillas

Entre dos orillas es un ejercicio singular de memorias, autobiografía y relatos históricos y artísticos que trasladan al lector a un viaje en el espacio y el tiempo con la danza y la música como vehículo de navegación entre las orillas vitales de su autora

 

Decimos un libro singular, porque el que se atreva a adentrarse en el viaje se encontrará escenas y relatos que no son habituales en obras biográficas o autobiográficas.
En ocasiones, porque las memorias no se corresponden con la realidad. Decía un conocido autor que había “firmado un contrato con una editorial, ellos van a escribir mi biografía, y yo me he comprometido a hacer lo que ponga”. En otros casos, como señalaba en frase célebre Jorge Luis Borges, “son el ejercicio de la minucia, un absurdo. Algunas constan exclusivamente de cambios de domicilio”.

No es este el caso. Los acontecimientos de la vida de la autora son únicamente la excusa para el viaje, ese que subtitula el libro: Un recorrido vital con el ballet y la historia como protagonistas. Es un libro que hace honor a esa otra forma de memorias, la que destacaba Thomas Carlyle cuando sentenciaba que “la biografía es la única historia verdadera”. Tatiana Solovieva busca y consigue en estas casi seiscientas páginas generar emociones e historias que no necesariamente son una autobiografía, son mucho más, busca que el lector dé su propia interpretación a los acontecimientos que aparecen en sus páginas.

La autora, Musicóloga por la Universidad (Academia Gnessins) de Moscú y la productora que más espectáculos de arte ruso ha traído a España, propone en su introducción el plan del viaje: “Mi vida ha transcurrido entre dos orillas a diferentes niveles, tanto en el espacio como en el tiempo: La Unión Soviética y España, la Unión Soviética y la Rusia actual. Pero hubo muchas otras orillas que me han marcado a lo largo de mi vida, historias que me han llegado desde el pasado, historias de las que fui testigo en todos estos años, historias que se escriben cada día que vivimos, historias que están siempre presentes en ese circuito sin fin trazado entre el corazón y la mente, historias interminables que van cobrando sentido a medida que los años van cerrando capítulos y se desarrolla la trama de la existencia de cada uno de nosotros”.

Saltando de capítulo en capítulo tras su labor profesional, la autora muestra el muy gratificante, pero duro y constante trabajo de hacer llegar el Arte a las gentes, porque como bien señala, en el Arte no sirven las medias tintas: “Lo peor que soporta el Arte es la mediocridad”… En esa tarea profesional, la autora cuenta como además de los conocimientos, necesitaba entender de dónde venimos y a dónde vamos, qué valores quería transmitir a la gente con sus espectáculos, cómo se desarrollaba el mundo teatral y qué podía aportar y, para esto, entendió que la lectura era absolutamente necesaria. Los libros, como fuente de sabiduría, son seres extraños en una época como la nuestra, donde la realidad queda ocultada tras el cartón piedra del mundo audiovisual. Para Tatiana Solovieva, “Los libros son como conversaciones con maestros que nos transmiten sus experiencias…. Creo que el lector encontrará en estas páginas un libro atípico, una especie de mezcla de curriculum vitae y enciclopedia de la danza, con guarnición de algunos otros espectáculos, reflexiones históricas y una salsa de recuerdos personales”.

 

Artículo: Diario Ya

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